Las viviendas en Polonia creadas por arquitectos españoles son cada vez más y el país se convierte en una alternativa para los arquitectos que se intentan recuperar de la crisis del ladrillo española
El arquitecto español, Carlos Lamela, ha sido el encargado de llevar a cabo varias promociones en el centro de Varsovia, la mayoría a través de firmas promotoras españolas.
La escasez de oportunidades profesionales es una realidad en la sociedad española que azota a la mayoría de ramas profesionales. Los arquitectos, quizás uno de los grupos más perjudicados por el estallido de la burbuja inmobiliaria y de la consecuente crisis, también deciden hacer las maletas y unirse a los 2,3 millones de españoles que decidieron probar suerte fuera del país. Carlos Lamela es uno de ellos.
Lamela ha diseñado hasta 32 proyectos residenciales en Polonia y de esos 32 proyectos, cuatro ya han visto la luz y otro más está en marcha. Las promotoras que apoyan estos proyectos también son españolas: Agofer Polska, Acciona Nieruchomosci, GP Investment, Globalia, etc.
Los cuatro proyectos ya construidos se encuentran en zonas céntricas de Varsovia y están pensados para acoger a vecinos de perfil económico medio y alto. El arquitecto, además de edificios residenciales, también está creando oficinas, infraestructuras de transporte, inmuebles comerciales e instalaciones deportivas, entre otras.
Lamela atribuye sus proyectos en la capital de Polonia a causas indirectas. “Nuestro desembarco en Polonia se debe al encargo Ferrovial de un proyecto para el concurso sobre la ampliación de la terminal de pasajeros del Aeropuerto Okecie de Varsovia en 1999. A raíz de este proyecto, decidimos instalarnos de forma estable en Varsovia”, asegura el arquitecto para El Mundo.
Los proyectos que esta llevando a cabo en Polonia son de altísima calidad técnica a causa de las estrictas normativas polacas, de ahí que se tenga que edificar de forma muy concienzuda.
El mercado de la vivienda en Polonia ha sufrido un desarrollo muy importante en los últimos 25 años y la caída del telón de acero ha tenido mucho que ver. Lamela cuenta que la sociedad polaca ha cambiado enormemente y existe una nueva clase media emergente profesional. Generalmente se trata de gente joven que demanda un nuevo producto al que anteriormente les ofrecía la ciudad.
En su opinión, se construye mejor en Polonia que en España, tanto desde el punto de vista de diseño, que se valora más, como técnico. Además, comenta que la vivienda polaca suele ser de menor tamaño que la española, dando prioridad a las viviendas de dos dormitorios y donde la cocina se presenta unida al salón en la mayoría de sus promociones.
A diferencia de España, la oferta de viviendas en Polonia se ha ido adaptando a la demanda de forma apaciguada, aunque el arquitecto recuerda que también hubo un momento de riesgo de burbuja provocada por inversores y promotores llegados de Irlanda y España, lo que hizo que la burbuja se fuera hinchando entre 2006 y 2008, pero afortunadamente no llegó a más.
Lema no tiene planes de volver a España a corto plazo y asegura que siempre que continúe teniendo proyectos se quedará en Polonia. Ahí ha tenido la oportunidad de construir dos campos de fútbol, dos estaciones de Metro y numerosos edificios y oficinas. Entre sus proyectos más suculentos se encuentra la creación de la Ciudad Deportiva del Legia de Varsovia, el equipo más importante de Polonia.