La población española nota, cada vez más, los efectos de la caída de la natalidad. Envejecimiento que hace que la edad media supere los 43 años. Y que solo consigue contrarrestar la llegada de residentes extranjeros a las principales ciudades. Un crecimiento en la población urbana que acaba derivando hacia zonas metropolitanas.
España se hace más y más mayor. Mientras sus ciudades se convierten en más y más cosmopolitas. La nueva edición del ‘Padrón Municipal Contínuo 2018‘, publicado esta semana por el INE, pone de relieve algunos fenómenos de gran interés.
Por un lado, la edad media de los habitantes supera la barrera de los 43 años. Cifra que sobrepasa en cerca de un lustro Asturias, con 48,5 años.
En el otro extremo, la población extranjera que reside en nuestro país es bastante más joven que la población local. Mientras los nuevos ‘recién’ llegados apenas superan los 36 años, los nacidos aquí se acercan a los 42 años.
Este relevo demográfico hace albergar esperanzas en poder frenar la caída de la población activa. Aunque el mayor número de residentes extranjeros escoge el centro de las grandes ciudades.
¿Qué sucederá entonces con los núcleos menos habitados? ¿Hacia dónde se moverá la población que se decide por la vida ‘urbana’?
“Sin duda, la gran esperanza está depositada en las áreas metropolitanas“, señala Luis Gualtieri. “Muchos de los residentes locales escogen tener aquí su nueva vivienda“, apunta el CEO de la agencia inmobiliaria Oi Realtor.
“¿Por qué renunciar a más espacio y mejores servicios si todo ello está a solo unos minutos del centro?“, pregunta Gualtieri.
La población aumenta en un 0,32%
De la última edición del Padrón Municipal Continuo, a partir de las estadísticas de 2018, se saca una excelente noticia. La población española ha aumentado en un 0,32% durante el último año. Hasta situarse en 46.722.980 habitantes.
El repunte se debe a la llegada de ciudadanos de otros países. De hecho, el grupo de residentes extranjeros crece un 3,54% y se sitúa en 4,73 millones de habitantes. Frente a una caída del -0,03% entre los españoles, que ahora suman 41,98 millones de habitantes.
Los nuevos residentes no solo son bienvenidos por el repunte demográfico que suponen. Si no también porque frenan el progresivo envejecimiento de la población general.
Mientras que la edad media de los españoles se sitúa en torno a los 43,9 años, la edad de los extranjeros se ronda los 36,01 años.
26 provincias pierden población en 2018
Según el padrón, a 1 de enero de 2019, más de la mitad de las provincias había perdido habitantes en el último año. Mientras que Madrid ha sido la región con mayor crecimiento. Tras sumar 70.895 habitantes.
Por delante de la provincia de Barcelona (+33.313 habitantes), de Alicante (+13.487 hab.), de Sta Cruz Tenerife (+10.869 hab.) y de Málaga (+10.506 hab.).
Frente a la variación en el número de habitantes, el envejecimiento también golpea a las regiones con más riesgo de despoblación.
Asturias es la comunidad autónoma con mayor edad media. En torno a los 48,05 años. Seguida de Castilla y León (47,35 años) y de Galicia (47,01 años). Mientras que Murcia,con 40,22 años, es la comunidad más ‘joven’.
“Existen casos extremos en las provincias de Ourense y Zamora“, añade Luis Gualtieri. “Ambas con una edad media que ronda los 51 años y demuestra la difícil situación de media España“.
Población urbana de carácter metropolitano
¿Dónde van los habitantes que pierden pequeños municipios y aldeas? “Sin duda, a las grandes ciudades“, manifiesta el CEO de Oi Realtor.
“Abandonar las zonas rurales para trasladarse a la ciudad es un fenómeno que sigue teniendo lugar en nuestro país“, recuerda Luis Gualtieri. “Oportunidades laborales, oferta de ocio y estabilidad siguen atrayendo a miles de personas cada año“.
Por ejemplo, la ciudad de Madrid cuenta con 3,2 millones de habitantes. De los que el 51% han nacido en el mismo municipio. Mientras que el 27% provienen de otra comunidad autónoma y el 21% de otro país. “Un lugar de encuentro. “De hecho, no deja de aumentar la demanda de pisos en venta en Madrid“, señala Luis Gualtieri.
Algo que también sucede en Barcelona, con 1,6 millones de habitantes. De ellos, un 51% también ha nacido en la la propia ciudad. Frente al 17% de residentes procedentes de otras comunidades y el 24% de otros países. “Así es el mercado y la demanda de pisos en venta en Barcelona“, finaliza el responsable de Oi Realtor.