En OI REAL ESTATE te mostramos el Domus de A Coruña. Esta obra es del arquitecto y teórico japonés Arata Isozaki y está ubicada al final del paseo marítimo en la playa de Riazor. Este predio es una zona rocosa, que mira directamente al mar.
El arquitecto Isozaki es ganador del Premio Pritzker, el galardón más respetado en el mundo de la arquitectura. Es reconocido por sus ideas innovadoras sobresalientes en sus obras, y por ser un una influencia en la arquitectura de Japón.
En este artículo encontrarás:
Descripción del Domus de A Coruña
Llamado también La Casa del Hombre, el proyecto es un Museo interactivo del Hombre. Construido entre los años 1993 y 1995, el Domus es el primer museo interactivo del mundo dedicado al ser humano.
La idea del museo es tratar en forma global y monográfica las características del hombre. Cuenta con más de 200 módulos interactivos para reflexionar sobre la especie humana y también participar en forma divertida y didáctica.
El desafío de proyectar en playa rocosa
La idea del arquitecto es el resultado de sumar un programa y un lugar propuesto por el Ayuntamiento de A Coruña. Con estas premisas Arata Isozaki decide diseñar el Domus, un edificio dividido claramente en dos partes funcionales dentro de un bloque solido e imponente, en una escala que permite que las formas sean distinguidas a la distancia, tanto por vía terrestre como marítima.
Sobre un basamento de piedra de granito gris de Mondariz, emerge un volumen curvo que recuerda a una gigantesca ola. Esta fachada imponente está orientada hacia el mar y por su forma soporta los vientos del Orzán como si se tratase de la vela de un navío hinchada por el viento.
Su parte posterior está conformada por una serie de volúmenes irregulares que forman una contraposición armoniosa con la fachada principal.
El proyecto del arquitecto Arata Isozaki es un hito urbano, por lo que se ha transformado en un símbolo estético de la zona. Y también propone un paseo exterior como el balcón propio de la ciudad, que se abre mirando al poniente: a la Bahía, y a la Playa del Orzán. Un espacio creado para disfrutar de múltiples formas, en el interior como el exterior como así también en el día como la noche.
Los materiales utilizados en el Domus de A Coruña
La propuesta arquitectónica de La casa del Hombre es un diseño que se enfrenta a la Naturaleza y que se posiciona e intermedia entre el Hombre y el Universo.
Los materiales y las técnicas constructivas son contrapuntos entre la tradición y la vanguardia, lo popular y lo culto. Elegidos en una lógica formal y funcional, como así también pensando en la durabilidad, conservación, y mantenimiento del edificio.
- La fachada principal es la marítima y está cubierta con losas verdosas sujetas con tornillos. La forma es una pantalla que oculta el interior simbolizando el cuerpo humano cubierto con una epidermis. Estas losas de pizarra de 50 x 53 cm, están sujetas mediante fijaciones a los paneles de hormigón pretensado.
- La fachada posterior tiene sillares de granito tipo gris Mondariz, trabados entre sí con una hoja de hormigón armado.
- La cubierta también tiene losas de pizarra tomadas con mortero de cemento sobre una losa formada por paneles aligerados.
- En todas las dependencias de uso público se utilizan losas irregulares de pizarra mientras que los entarimados son de madera de xatoba en la Sala de Actos, oficinas, aulas y biblioteca.
- Lo muros interiores son de granito Mondariz en todas las dependencias de uso público, mientras que en la sala de actos, oficinas y biblioteca los muros están revestidos con paneles DM ignífugo pintado.
- Otro material utilizado es la madera pintada en la biblioteca, aulas y oficinas.
La Casa del Hombre, un museo que se vive
La obra se levanta en torno a una gran área expositiva de 1.200 metros cuadrados de superficie sumada a otras dependencias tales como un salón de actos, una sala de exposiciones temporales y otras de rango inferior.
En la fachada marítima hay una estatua en bronce de Fernando Botero llamada «Soldado Romano». En cuanto a las actividades del museo están dispuestas por un comité científico integrado por profesionales de las ciencias y las artes. Ellos asesoran a la dirección del museo sobre los contenidos y las exposiciones.
Espacios interiores
El interior está claramente definido por dos partes tomando en cuenta su función y su configuración. En primer lugar el edificio principal y por otro lado los espacios complementarios que la circundan.
El proyecto está atravesado por un eje de comunicación horizontal que divide el edificio en dos funciones. El recorrido que atraviesa las salas de exposiciones desemboca en los cuatro únicos ventanales practicados en la fachada principal que lo transforman en un mirador para disfrutar del paisaje de la Ciudad y del Mar.
El protagonismo de la superficie cubierta del Museo Interactivo del Hombre corresponde a las Salas de exposiciones, Temporales y Permanentes. En este espacio de encuentro entre ambas superficies, hay un lucernario. Esta luz cenital, se refleja en las suaves curvaturas de la fachada marítima, añadiendo potencia y serenidad al espacio expositivo.
En otro lado del eje el edificio se ubican las oficinas, dependencias Auxiliares, zona de servicio y el Salón de Actos.
En la zona baja de encontramos áreas recreativas donde están el área de picnic, un Restaurante – Bar que dispone de acceso directo e independiente desde el exterior. Lo rodea una pequeña plaza que ayuda a su ampliación como terraza en algunas épocas del año.
Detalles del Domus de A Coruña
El edificio principal donde se encuentran las salas de exposición se asienta sobre un macizo granítico. Aquí hay un desnivel irregular de unos 20 metros, que son aprovechados para crear una serie de plataformas comunicadas entre sí por medio de rampas.
La sala de exposiciones permanente, ubicada en 4 niveles integrados y comunicado con rampas, está delimitada por una única cubierta y por la asombrosa superficie cóncava de la fachada marítima o principal.
La sala de actos tiene un acceso directo desde el exterior lo que le da autonomía funcional e independiente del museo.
Los espacios complementarios exteriores son parte del gran diseño creado por Isozaki y cada uno de ellos es parte de la composición urbanística. Entre ellos encontramos:
- El Baluarte
- La Plaza
- La Escalinata
- Las terrazas
- Los Pórticos
- El Jardín
- La pequeña Plaza con pérgola
- La explanada
- El Macizo Rocoso
El Balcón Mirador está encaramado a un monte rocoso existente. Se respeta la topografía manteniendo su cota y forma. Su diseño es poligonal, definido y abrigado por un muro perimetral. Como su acceso se realiza a través de la zona de pic-nic, es un lugar muy concurrido en épocas de clima amigable.
¿Qué te pareció la obra de Arata Isozaki? ¿Visitarías este museo? Si tienes algún comentario, puedes escribirnos en la casilla debajo del post. ¡Nos interesa mucho tu opinión!
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