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En Oi Real Estate apostamos a que construyas una vivienda sostenible, pero ¿cuáles son sus pros y contras? Aquí te los contamos.

La demanda de viviendas sigue creciendo, más aún teniendo en cuenta la crisis tanto sanitaria como social desatada por el covid-19. Los últimos datos oficiales indican que las personas que demandan nuevos inmuebles están muy interesadas, después de la pandemia, por casas que sean eficientes o por los chalés.

Los últimos datos que ofreció el Consejo General de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria en España, indican que la demanda de inmuebles eficientes creció un 30% desde que comenzó la pandemia. Con esta información también podemos comparar que el Colegio de Registradores y el Banco de España informaron que el incremento de compra de viviendas unifamiliares se incrementó un 21%, una cifra muy alta a nivel histórico. Por eso, los inmuebles eficientes y las viviendas unifamiliares tienen un protagonismo muy pujante.

¿Qué está sucediendo?

Hoy en día, con el auge del teletrabajo, que parece que llegó para quedarse, al menos en un gran porcentaje de los trabajadores, creció la tendencia de mudarse a localidades con menor densidad de población, en donde las viviendas son más económicas. Según datos del INE, entre enero de 2020 y 2021 se produjo un aumento de la increíble cifra de 57.000 españoles en los municipios de menos de 10.000 habitantes, y de 5.000 personas en poblaciones de 5.000 habitantes.

¿Qué es lo que conviene?

Te preguntarás qué es lo que conviene, si construir una vivienda nueva y sostenible adquiriendo un terreno, o reacondicionar la que ya tienes para transformarla en sostenible. Las dos opciones llevan consigo muchas decisiones, por eso te proponemos seguir estos consejos para elegir cuál es más conveniente.

Los pros y los contras de la vivienda sostenible

  • Una rehabilitación sostenible, punto por el cual se preocupan en la agenda nacional y europea. Una rehabilitación sostenible les da valor a los edificios y contribuye a que se recuperen y se mantenga el patrimonio arquitectónico. Además, permite que se actualice a las demandas de calidad, eficiencia y seguridad de la normativa vigente. A todo esto hay que añadirle que reduce el impacto negativo sobre el medio ambiente, y la generación de residuos y el consumo eléctrico es menor.
  • Las propiedades de segunda mano que son rehabilitadas tienen mejor ubicación y aumentan su valor. Así estén ubicadas en un pueblo o una ciudad, las casas antiguas están mejor ubicadas. Una vez reformadas, su valor será mayor.
  • Mayor libertad para el diseño de la obra nueva. En una reforma siempre hay posibilidades para realizar una idea o diseño arquitectónico interior, pero también existen limitaciones como la orientación de la vivienda, los huecos en la fachada, la estructura del edificio, instalaciones generales. Como se trata de un inmueble unifamiliar, estas barreras pueden superarse, pero demandarán más tiempo y coste comparando con una vivienda de obra nueva, con la que tendremos mayor libertad para diseñar, cumpliendo siempre con la normativa vigente.

Mas argumentos para la vivienda sostenible

  • Si es obra nueva, habrá más exigencias sostenibles. Podemos encontrar en el Documento Básico de Ahorro de Energía del CTE cuáles  son las intervenciones de cumplimiento obligatorio para el ahorro de energía en edificios de obra nueva y la intervención en edificios que ya existen. Los criterios para aplicar tienen un mayor grado de flexibilidad en la elección de soluciones, con demandas más flexibles en edificios viejos y más exigentes en obra nueva.
  • Con una construcción nueva es posible acceder al sello Passivhaus. En la actualidad hay muchos sellos o etiquetas que verifican y certifican la sostenibilidad de los edificios en obra nueva. Estos pueden ser el Passivhaus, el BREEAM o el LEED. Pero si se trata de edificios rehabilitados, existe una gran dificultad para alcanzarlos por los exigentes criterios que tienen los certificados de este tipo.
  • Lo que gastes con ambas opciones no va a diferir mucho en su coste. Si bien es menor en la rehabilitación, una vivienda antigua para convertirla en un inmueble eficiente puede llevar muchos gastos que tienen que ver con los cambios estructurales, cambios en las instalaciones eléctricas y de fontanería, puertas y ventanas, etc. Por eso, el coste puede llegar a ser similar que el de una obra nueva.

Los últimos

  • Construir una vivienda nueva te llevará a buscar un terreno correcto. Si no tienes un terreno, buscar un suelo no es una tarea sencilla. Tienes que saber que el terreno debe ser edificable, valorar sus accesos, orientación, su pendiente, la dimensión y el subsuelo, todo adecuado para construir. Es bueno que consultes la normativa urbanística actual. Además, piensa en un préstamo hipotecario para financiar la obra nueva.
  • Plazos inferiores si es una reforma. Una obra nueva puede tener tiempos enormes de edificación, mucho más que los de una reforma. Pero si vas a construir una obra nueva, puedes estimar la fecha de finalización del proyecto, porque necesitarás un arquitecto y un arquitecto técnico en el proyecto. También es probable que en una reforma surjan imprevistos que prolonguen el tiempo de la obra.

Aquí ya tienes los pros y los contras de construir una vivienda sostenible, o de reformar la que ya tienes. Con estos puntos podrás elegir cuál te conviene más y adaptarte a las nuevas normativas. Y sobre todo, a un mundo que se encuentra en constantes cambios y que necesita que empecemos a pensar de forma ecológica y cuidando al medio ambiente.

Ahora podrás apuntarlos y decidir la mejor manera, y la que más te convenga, para poder lograr reformar tu casa como te guste, y además, hacerla sostenible, cuidando la energía y todo lo que ello conlleva.

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Creada en Ámsterdam con madera y cartón, esta casa sostenible revoluciona el mercado. ¿Cómo está fabricada y cuánto dura?

El interés por el cuidado del medio ambiente en el ámbito de la construcción hace que las viviendas sean cada vez más pequeñas y se fabriquen en base a materiales amigables con el planeta.

Ejemplo de ello es la Wikkelhouse, una casa sostenible hecha con cartón y madera, 100 % biodegradable, que cada vez se vuelve más popular en distintos países.

El desarrollo está a cargo de Fiction Factory, una empresa de creativos de Ámsterdam que trabaja desde 1989 en la construcción de interiores excepcionales, stands de feria y mobiliario para una audiencia mundial. 

Wikkelhouse es un concepto flexible. Los segmentos individuales se vinculan entre sí mediante enlaces invisibles para conformar desde un stand o una sala de exposición, hasta una casa o una oficina.

Una casa sostenible hecha de madera y cartón

casa sostenible madera cartón

La base de Wikkelhouse es cartón de fibra virgen. Este material es obtenido de árboles escandinavos y su popularidad es bien fundada debido a que es económico, flexible, resistente, fácil de manipular, biodegradable y ecológico.

¿Cómo arman la estructura? Una máquina de gran tamaño envuelve con capas de este material un molde con forma de casa. Las capas se mantienen unidas con pegamento ecológico y entre cada rollo de cartón se agrega otra de listones de madera.

“Esto crea una estructura tipo sándwich, resistente y aislante”, explican sus creadores acerca del habitáculo, que se sella en su parte externa con un recubrimiento resistente al agua.

El sistema de construcción patentado, que consiste en un total de 24 capas de fibra virgen de cartón, recibe el nombre de Wikkelhouse por el verbo holandés “wikkelen”, que significa envolver.

Los módulos de esta singular casa se presentan como si fueran rebanadas de una barra de pan. Los segmentos se colocan uno al lado del otro sobre un chasis, lo que permite que la construcción pueda expandirse de forma longitudinal indefinidamente.

Además, puede fabricarse en tan solo un día y entregarse con fachadas de vidrio o cerradas. “Es un diseño único y contemporáneo, que crea espacios habitables y creativos”, destacan sus impulsores. 

Con un diseño de vanguardia, este concepto de vivienda reduce los costos y el tiempo de instalación. Por otra parte, a diferencia de las construcciones clásicas, no contamina ni genera desechos.

Las casas se construyen con segmentos de 1,2 metros de profundidad, de manera que los diseños pueden ser muy flexibles para adaptarse a cada necesidad. Asimismo, gracias a su extrema ligereza, no requiere de cimientos: puede montarse en la playa, en el bosque o cualquier otro escenario.

¿Cuánto sale una Wikkelhouse?

casa sostenible madera cartón

Hasta el momento, la empresa tiene más de 100 casas instaladas en distintos países del mundo. Cada una de ellas tiene un ciclo de vida de 50 años y es completamente reciclable. 

Según aseguran sus creadores, la vivienda tiene una “resistencia constructiva excepcional”, una “acústica inigualable” y calidades óptimas de aislamiento.

Dado que es un concepto modular, el precio se basa en la configuración de los segmentos necesarios. 

Puedes hacer tu Wikkelhouse tan grande como quieras, pero un segmento es de 5 m2 (largo: 4,5 metros; ancho: 1,2 metros; alto: 3,5 metros).

Comprando tres segmentos (sin IVA, transporte ni colocación), el valor de estas viviendas va desde los 40.000 euros. Sin embargo, la mayoría de las casas se venden entre los 50.000 y los 85.000.

¿Por qué esta casa de cartón y madera es sostenible?

casa sostenible madera cartón

Este tipo de residencia modular y prefabricada cumple con los criterios de vivienda temporal o permanente, es tres veces más ecológica que una tradicional y cuenta con paneles solares para alimentar la energía de la caldera

Todos los materiales utilizados son reciclados y respetuosos con el medio ambiente. Además, la producción de cartón necesario tiene menor impacto en el planeta que la elaboración de cemento y la casa puede reciclarse al 100 % luego de su uso.

Por otra parte, el hecho de que se trate de una vivienda pequeña supone un importante ahorro. No solo durante la fase de construcción, sino también a lo largo de todo su mantenimiento. Los espacios más compactos consumen una menor cantidad de energía y limitan la capacidad de acumulación de bienes físicos en su interior.

Asimismo, la prefabricación reduce la cantidad de desechos en obra y las emisiones vinculadas al transporte de residuos al vertedero. Esto también acelera la ejecución material del proyecto, al mejorar la precisión y la eficiencia, minimizando las emisiones por transporte de personal a obra.

¿Cómo identificar una casa ecológica?

Según sostiene el presidente del Consejo de la Construcción Verde, Aurelio Ramírez, una casa debe tener en cuenta ciertas características para considerarse ecológica:

  • Emplazamiento: es importante evitar zonas industriales de gran contaminación atmosférica, muy ruidosas, cercanas a grandes líneas de alta tensión o cuyo subsuelo esté recorrido por venas de agua subterránea o fallas geológicas.
  • Vegetación: contar con una buena cantidad de verde tanto en el exterior como en el interior de la casa permite disminuir los efectos de la contaminación atmosférica. Y también los ruidos.
  • Diseño: el diseño bioclimático y una correcta orientación solar de la vivienda es clave para la correcta regulación de los cambios climáticos y de temperatura.
  • Materiales: los materiales deben ser lo más naturales y ecológicos posible, evitando aquellos tóxicos, radiactivos, que generen gases o electricidad estática.
  • Pinturas: hay que procurar que las pinturas sean naturales o al menos no tóxicas. En el mercado existe una amplia gama de pinturas ecológicas, como aquellas hechas en base a silicato, cal, arcilla o fuentes vegetales.
  • Mobiliario y decoración: para el mobiliario y la decoración interior son preferibles la madera y las fibras naturales.
  • Ventilación: la correcta ventilación permitirá evitar problemas de acumulación de elementos tóxicos o radiactivos (como el gas radón) en la vivienda.
  • Eficiencia energética: el ahorro de electricidad, gas y agua es otra premisa indispensable para una casa ecológica. Esto impacta tanto en sus moradores como en el entorno.

Si te interesa la construcción amigable con el medio ambiente, no dejes de leer otros artículos sobre sostenibilidad de Oi Real Estate:

Poner en práctica hábitos amigables con el medio ambiente es más fácil de lo que muchos piensan. Conoce algunas técnicas para ahorrar energía, reciclar y reutilizar que harán de tu vivienda un espacio más sostenible. 

La generación indiscriminada de residuos es una de las problemáticas ambientales más importantes de la sociedad moderna. Frente a esto, existen ciertos hábitos hogareños que podemos modificar para que nuestra vivienda sea más sostenible y tenga un menor impacto sobre el planeta. 

Evitar consumir plásticos de un solo uso, reciclar, comprar elementos de segunda mano, cuidar la energía y estar atentos a las etiquetas de los electrodomésticos son algunas medidas que pueden acercarnos a este objetivo. Echémosle un vistazo a una serie de técnicas sencillas que puedes aplicar en el día a día.

Compras responsables

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Con la nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados, España prevé acabar con el consumo de plásticos de un solo uso como pajitas, bastoncillos, platos y cubiertos, así como con la distribución gratuita de envases no reutilizables. 

En esta línea, reemplazar los productos envasados por compras a granel u optar por recipientes de vidrio o tela por sobre aquellos de materiales contaminantes puede ser una buena opción. 

Llevar bolsas propias a la compra también es una excelente alternativa, al igual que consumir productos de proximidad y de temporada. Esto reduce el impacto ambiental, además de aparejar beneficios sociales y económicos en la región.

Por último, podemos reutilizar los envases. Hay muchísimas ideas que circulan en internet. Verás cómo con poco esfuerzo y algo de ingenio lo que considerábamos residuos se convierten en elementos decorativos o útiles, ideales para una vivienda más sostenible.

Habitaciones multiuso

Como vimos cuando hablamos de casas minimalistas, la reducción de la superficie de una vivienda supone un importante ahorro, no solo durante la fase de construcción sino también a lo largo de todo su mantenimiento.

Además, los espacios más compactos consumen una menor cantidad de energía y limitan la capacidad de acumulación de bienes físicos en su interior.

En esta línea, un diseño versátil y flexible de las habitaciones permite que estas se adapten a diferentes situaciones o necesidades del usuario.

Los muebles multiuso son realmente útiles para cumplir este objetivo, ya que consiguen ser funcionales ante diversos requerimientos y hacen que no sea necesario adquirir demasiado mobiliario.

Huerto en el balcón

El confinamiento por la pandemia de coronavirus nos ha obligado a permanecer en nuestras casas. Durante este tiempo, muchos han aprovechado para armar un huerto en el hogar, actividad que puede resultar verdaderamente exitosa aun en espacios reducidos.

Esta iniciativa tiene infinidad de beneficios. Algunos de ellos son que nos permite estar en contacto con la naturaleza, obtener nuestro propio alimento, ahorrar dinero y evitar el uso de plásticos.

Plantar nuestros propios vegetales en el hogar, inclusive en el balcón, no requiere de demasiados elementos. Basta con hacernos de un huertero, macetas o canteros, tierra rica en nutrientes, semillas o plantines y una pala de mano u otro objeto para manipular la siembra.

Además, los pasos a seguir son muy simples:

  • Mínimo de sol: el lugar donde dispongamos las plantas debe tener al menos cuatro horas de sol aseguradas. Esto es necesario para que la siembra crezca en buenas condiciones. 
  • Tierra buena: es recomendable conseguir tierra negra mezclada con compost para que tenga más nutrientes.
  • Riego adecuado: para corroborar si la vegetación tiene o no suficiente agua, es útil tocar la tierra periódicamente. Debe permanecer siempre algo húmeda.
  • Macetas adecuadas: estas deben tener una profundidad mínima de 40 centímetros y estar perforadas para asegurar un buen drenaje. Además, es importante apoyarlas sobre algún objeto que las eleve para permitir que el  líquido fluya y la planta no se ahogue.

Las plantas que crecen más fácilmente en cualquier condición son las aromáticas. Esto es debido a su especial resistencia a las condiciones hostiles. Entre las más comunes se encuentran el romero, el orégano, el tomillo, la menta y el perejil.

Además, en la época de calor es ideal sembrar vegetales como apio, berenjena, cebolla, zanahoria, tomate, brócoli, choclo, repollo, zanahoria y puerro.

Separación de residuos

Cuando hablamos de residuos, nos referimos generalmente a los sólidos urbanos. Estos son aquellos generados en domicilios particulares, comercios, oficinas e incluso la vía pública.

Este grupo está formado por diferentes tipos de basura: vidrio, papel y cartón, restos orgánicos, plásticos, textiles, metales, madera y escombros.

En España, la recogida se realiza en tres contenedores distintos. Amarillo para envases, brics y latas; verde para vidrio; azul para papel y cartón.

Los restos orgánicos, en tanto, van en otro contenedor, cuyo color varía según la ciudad. La ropa también va en contenedores especiales, al igual que las pilas y los productos electrónicos.

Es muy importante participar activamente de esta separación para disminuir el impacto de los desechos en el medio ambiente. Según Ecoembes, en el país se enviaron a plantas recicladoras en 2020 casi 1,5 millones de toneladas de envases domésticos de plástico, brik, metal y papel. 

Sin embargo, hay algo más importante que también podemos hacer: compostar. Este proceso no es más que la descomposición de los desperdicios orgánicos a través del cual la materia vegetal y animal se transforma en abono. 

Esta acción solo requiere de entre cinco y diez minutos cada uno o dos días, puede hacerse en viviendas sin jardines ya que existen composteras para pequeños espacios y no tiene mal olor ni atrae insectos.

Vida vintage

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Darle una nueva oportunidad a los objetos es otra de las acciones que podemos llevar adelante para cuidar el medio ambiente. 

Reparar o reutilizar muebles, indumentaria y otros elementos hará que nuestra vivienda sea más sostenible y al mismo tiempo cuidará nuestro bolsillo.

En esta línea, desde hace años que lo vintage se convirtió en tendencia y las tiendas de segunda mano reciben a miles de personas en busca de “tesoros” olvidados.

También es una buena idea recurrir al “hazlo tu mismo” y pensar de qué forma convertir una prenda de vestir en alguna otra con unos pocos conocimientos de costura, o dejar en condiciones una mesa o un juego de sillas con unas buenas manos de pintura.

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