Un aspecto a tener en cuenta en el mercado residencial es el pago de los impuestos de la vivienda. Detalle que influye en el día a día de los residentes y en el valor de las propiedades de cada municipio.
Entre cincuenta capitales de provincia, dos ciudades autónomas (Ceuta y Melilla) y miles de municipios repartidos por España, existe una cierta competitividad tributaria.
Impuestos de circulación, tasas de basuras, actividades económicas o permisos de obras son algunos de los tributos que más afectan a los residentes en la diferentes ciudades. Pero, ¿qué sucede con el IBI y la plusvalía? ¿en qué municipios requieren de un mayor esfuerzo?
El Ayuntamiento de Madrid elabora anualmente un ‘Ranking Tributario por Municipios‘. Un documento del que se acaba de publicar la edición 2017.
Herramienta básica para conocer la carga fiscal ciudad a ciudad. Y para descubrir que no siempre las ciudades más grandes son las más caras.
Tributos ciudad a ciudad
El informe tributario del Ayuntamiento de Madrid es una clasificación de ciudades que se elabora desde el año 2003.
En su confección se tienen en cuenta los principales tributos municipales en capitales de provincia, ciudades autónomas y municipios de la Comunidad de Madrid con más de 50.000 habitantes.
Como resultado, las principales ciudades españolas salen ordenadas según la cuota de los impuestos sobre Bienes Inmuebles (IBI), de Actividades Económicas, de Vehículos de Tracción Mecánica, sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) y sobre el Incremento de Valor de Terrenos de Naturaleza Urbana (plusvalía).
Impuestos de la vivienda: el IBI
El Impuesto sobre Bienes Inmuebles es un tributo anual que establece cada ayuntamiento, existiendo importantes diferencias entre lo que pagan unos residentes y otros a nivel nacional.
En el último informe tributario, Soria es la capital de provincia con un IBI más elevado. Nada menos que una media de 152,46 euros anuales. A continuación encontramos capitales como Tarragona (148,43 €), Lleida (139,01 €), Melilla (132,02 €), Ciudad Real (132 €), Toledo (129 €) o Salamanca (117,67 €).
Todas ellas superan a la primera de las grandes capitales, Barcelona. La ciudad condal es la octava capital en el ranking con una cuota anual de 116,57 euros.
Mientras que Madrid ocupa la decimosexta posición con 110,79 euros al año. Cerrando el ranking las tres capitales vascas (San Sebastián (47,92 €), Bilbao (47,50 €) y Vitoria (41,21 €)) junto a la capital navarra (Pamplona (22,99€)).
Tres impuestos desiguales
En relación al IAE, el Estado fija una cuota anual (601,2 euros) y es el ayuntamiento quien modifica la cuantía. En ese sentido, Huelva es la capital donde más se paga, seguida de San Sebastián y Almería. La ciudad de Madrid es decimoquinta y Barcelona decimonovena .
En el Impuesto de Circulación, establecido por cada municipio, San Sebastián y Vitoria son las ciudades más caras. Con 84,51 euros y 74,78 euros, respectivamente. Mientras que Barcelona es vigésimo cuarta (64,06 €) y Madrid trigésimo sexta (59 €).
Del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras cabe destacar que Bilbao, Pamplona, San Sebastián y Vitoria ocupan el primer lugar con una cuota de 300,51 euros. Al tiempo que en Madrid se pagan 240 euros y en Barcelona 201,34 euros.
Impuestos de la vivienda: la plusvalía
Otro de los impuestos de la vivienda, no exento de polémica, es la plusvalía municipal.
Según los últimos datos existe una larga lista de capitales de provincia donde se paga la cuota media más elevada: 180,30 euros. Aquí encontramos a Alicante, Barcelona, Cádiz, Córdoba, Cuenca, Granada, Huelva, León, Logroño, Murcia, Oviedo, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria, Salamanca, Santa Cruz de Tenerife, Teruel, Vitoria y Zaragoza.
Madrid ocupa el vigésimo sexto lugar con 174,29 euros. Mientras que Bilbao cierra el ranking nacional con una cuota media de 27,71 euros.