Moverse sobre dos ruedas es una de las mejores alternativas para conocer una ciudad mediterránea. En su apuesta por la sostenibilidad, la ciudad condal quiere que recorras Barcelona en bicicleta y no perderte así ningún detalle.
Barcelona es una ciudad de referencia para el ciclismo urbano. Posee un servicio de Bicing ya consolidado, un clima mediterráneo muy suave, y diversos tipos de terreno adaptados a todos los niveles. Pasear junto al mar, ascender rumbo a la montaña o pedalear por paseos semipeatonales a los que rodean obras de arte de la arquitectura son las opciones de una ciudad que ama la bicicleta.
El último Barómetro de la Bicicleta, elaborado por la Generalitat, confirma la pasión ciclista catalana. Un 56,8% de los habitantes de Catalunya tiene bicicleta para uso personal y un 44,5% la usa con alguna frecuencia. En total, y según datos de 2014, cerca de 2,8 millones de catalanes utilizan de vez en cuando la bicicleta. Y algo más de 450.000 personas pedalean a diario.
Esta creciente afición por las dos ruedas choca en ocasiones con el uso del vehículo privado. Dos tipos de movilidad de las que se ha hablado en la reciente edición de la Smart City Expo, y que necesitan de un cambio de tendencia.
En esa línea, la ciudad de Barcelona triplicará los kilómetros de carril bici desde ahora y hasta 2018. Mientras, establecimientos de todo tipo se van sumando a una amplia oferta de servicios para ciclistas.
¡Conozcamos las novedades de Barcelona en bicicleta!
300 kilómetros en bici
Barcelona cuenta hoy con 115 kilómetros de carriles bici. Una red que permite llegar a muchos rincones de la ciudad con enorme facilidad.
Sin embargo, lejos conformarse el nuevo Plan de Movilidad Urbana se plantea triplicarlos para alcanzar 308 kilómetros en 2018. Un plan que pretende incrementar en un 67% los 136.000 desplazamientos que a diario soportan las calles de la ciudad.
El objetivo no es únicamente ampliar sus dimensiones, sino también hacer que funcionen como una auténtica red metropolitana. Una red que impulse a que el 95% de la población posea una bicicleta y a que cualquier barcelonés resida a menos de 300 metros de un carril bici.
Nuevos ejes ciclistas en calles verticales (Pau Claris, Casanova o Marina), horizontales (St Antoni Maria Claret o Travessera de Gracia) o a lo largo de avenidas (Paseo Vall d’Hebron, Via Favència o Avenida Esplugues) se sumarán y conectarán con los actuales, como el de la Avda Diagonal.
Un plan para hacer que los trayectos en coche sean una quinta parte del total; y circular, estacionar o guardar la bicicleta en Barcelona sea mucho más seguro.
El potencial del cicloturismo
Moverse en bicicleta es, más que una moda, todo un estilo de vida. A las dos ruedas se sube incluso el mundo de los viajes, con una oferta que respeta el medio ambiente de manera saludable.
El volumen de negocio que el cicloturismo supone para la economía europea asciende a 43.940 millones, y de ellos 1.620 millones corresponden a España. Un sector que con gran potencial de crecimiento si lo comparamos con los cerca de 7.500 millones de Francia.
En Barcelona, cada vez más hoteles ofrecen bicicletas a sus clientes, e incluso se multiplican los alojamientos acreditados con el sello de calidad Bikefriendly. En ellos se puede encontrar un espacio para aparcar, lavar o incluso reparar la bici. Además de rutas guiadas y asesoramiento integral.
Adheridos a al sello Bikefriendly podemos encontrar más de 150 hoteles en toda España, la mayoría de entre 3 y 4 estrellas.
Hoteles que nos pueden llevar a descubrir Barcelona calle a calle, o la Costa Brava y el Pirineo a través de antiguos trazados ferroviarios (rutas verdes).
Ocio de bicicleta
A la antigua costumbre de ir de cena en coche le toma el relevo ‘acercarse’ en bicicleta. Nada casual si tenemos en cuenta que en España se venden ya más bicicletas que coches, (Fuente: Asociación de Marcas y Bicicletas de España) con más de un millón de unidades en 2014.
Las facilidades para aparcar son mucho mayores, pero siempre se agradece poder recurrir a un establecimiento donde poder guardar la bicicleta. Con ese objetivo, dos jóvenes barceloneses crearon la web Fixed Lover.
Este portal contiene cerca de 70 bares y restaurantes de Barcelona donde se permite la entrada de bicicletas, para disfrutar con total tranquilidad de los momentos de ocio.
Un almacén, un patio o un trastero son suficientes para dar un valor añadido a un creciente número de clientes. Y tal es el éxito que ciudades como Liverpool o Madrid ya están pensando en adaptar la iniciativa.
Un ’hub’ de la bici
Al futuro de las dos ruedas le quedan aún muchas páginas. Pero una de las esperadas puede ser la creación de una cooperativa vinculada a la bicicleta en Barcelona.
El antiguo almacén industrial ‘Can Picó‘, situado en el Poblenou, ofrecerá diversos servicios vinculados con la promoción y el uso de bici. Incluido un taller mecánico, una tienda y el Observatorio de la BiciBcn.
¡Todo un ‘hub’ barcelonés de la bicicleta!
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