Los activos alternativos y la promoción en ciudades secundarias están llamados a ser protagonistas de la inversión en 2018. La escasez de suelo en las grandes ciudades está llevando a muchos inversores hacia otras oportunidades de negocio.
Junto a la inversión residencial en Madrid, Barcelona o Valencia, por compra de edificios enteros o de suelo, otros activos han ido ganando peso entre los compradores. Entre ellos, diversos tipos de residencias o suelo urbanizable en ciudades de tamaño medio.
Esta situación se consolidará en 2018. Por un lado, las socimis han permitido abrir el mercado hacia otro tipo de inmuebles. Los llamados activos alternativos. Un sector que aún tiene poca competencia, con rentabilidades que pueden oscilar entre el 6 y el 6,5%. Y por el otro, la oportunidad de poder invertir en suelo urbano lejos de las principales ciudades españolas.
Desde la tasadora Gesvalt, en el marco de la Spanish Conference celebrada en el MIPIM 2018, se ha querido poner énfasis en este tipo de inversiones. Una manera de hacer frente a la escasez de nuevas promociones residenciales en el centro de las principales capitales. Y de no perder la oportunidad única que actualmente ofrece el mercado caracterizado por la confianza inmobiliaria.
La oportunidad de los activos alternativos
Frente al agotamiento de los activos tradicionales en las principales zonas prime, muchos inversores han pasado a escoger activos core con rentabilidades estables.
“Son una oportunidad de inversión formada por activos de tipo secundario y segmentos poco explorados“, asegura Sandra Daza (Gesvalt).
Entre los activos de tipo retail, mientras los principales ejes de Madrid y Barcelona ofrecen rentabilidades cercanas al 3,25%, ciudades secundarias como Sevilla o Valencia alcanzan retornos del 4%. Aunque gran parte de la atención del inversor acaba teniendo como destino los centros comerciales.
Algo parecido sucede con la inversión en oficinas. Cuya rentabilidad pasa de rondar el 5% en las dos capitales al 6% en mercados de tipo secundario. Destacando la rehabilitación de edificios enteros como una buena oportunidad de negocio.
El mercado pone frente al inversor nuevas posibilidades para aprovechar el ciclo positivo. Apostando por activos alternativos, muy rentable a la vez que especializados. Una oportunidad que no debe dejar escapar.
Las residencias en la inversión inmobiliaria
En opinión de Gesvalt, entre los activos alternativos con más potencial para el inversor destacan las residencias de estudiantes.
Se trata de un segmento con escasa competencia y un volumen de negocio cercano a los 455 millones de euros, cuya inversión se ha disparado por encima del 1.000%.
La falta de una oferta suficiente para cubrir la creciente demanda hace que la inversión en residencias estudiantiles llegue a ofrecer rentabilidades del 6 al 6,5%.
Un caso muy parecido es el de las residencias geriátricas. Centros para la tercera edad que con el envejecimiento demográfico de España pueden llegar a ofrecer grandes retornos. Del 6% en los mercados prime y del 7% en mercados secundarios.
Finalmente, el tercero de los activos alternativos destacados por Gelvalt son las estaciones de servicio. Un segmento en auge con un pequeño desembolso inicial y rentabilidades que van del 6,5% al 8%.
El suelo en mercados secundarios
La carestía de suelo finalista en las principales capitales pone en valor el suelo disponible en mercados secundarios.
Frente a ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia, urbes como Sevilla pueden ofrecer excelentes oportunidades de inversión.
De hecho,la capital hispalense ha incrementado en un 158% la transacción de suelo urbano. Al tiempo que ha aumentado en un 34% los visados de construcción de obra nueva.
Otras ciudades igualmente atractivas para el inversor son Bilbao o Málaga. Sin olvidar el caso de Alicante, líder en número de compraventas el pasado 2017.
En ese sentido, la rentabilidad media por la compra de vivienda para ponerla en alquiler el 7%. Una buena oportunidad que quiere hacer aún más interesante el nuevo Plan Estatal de Vivienda 2018-2021.
Cuyo plan de ayudas incluye partidas específicas para promotores que rehabiliten viviendas para alquilarlas.