La recuperación económica vuelve a poner en valor a la rentabilidad inmobiliaria. De hecho, invertir en vivienda es la opción preferida para sacar un alto y seguro rendimiento a nuestro dinero.
Entre las principales tendencias de consumo y los hábitos más frecuentes de ahorro, la vivienda sigue ocupando un lugar destacado.
La quinta edición del ‘Estudio de comparación online sobre el ahorro 2018‘, elaborado por Rastreator, pone de relieve la opinión de los consumidores en relación a como se gasta y se invierte en España.
Un informe que analiza seis sectores concretos: los seguros, la telefonía, las finanzas, la automoción, el turismo y la energía. Y aunque no se analiza directamente el mercado de la vivienda, son diversas las referencias al sector inmobiliario.
Por un lado, en un sentido financiero. Vinculado al ahorro y la inversión en forma de activos inmobiliarios. Y por el otro, debido a la importancia que la vivienda tiene en nuestro día a día. ¿Qué seguro contratamos? ¿Dónde nos alojamos al ir de viaje? ¿Cómo nos movemos (coche,..)? ¿Qué medidas de eficiencia energética hacemos servir?
Factores que determinan la importancia del hogar en el consumo y el ahorro de los españoles.
Invertir en vivienda para un ahorro ‘seguro’
Un 70,2% de los ahorradores españoles sigue confiando en la compra de vivienda como una inversión segura. Esta estadística, elaborada por Rastreator, valora positivamente la recuperación de la economía y el consumo.
De hecho, además de quienes compran una casa para vivir en ella también existen muchos pequeños inversores. Personas que quieren rentabilizar el hecho de invertir en vivienda. Vendiendo el inmueble tras una reforma o sacando un beneficio mes a mes.
Concretamente, el 22,2% de los españoles compraría una vivienda para ponerla después en alquiler.
Sea como sea, España sigue siendo un país de propietarios. Los datos de este informe desvelan que un 74,2% de los entrevistados prefiere ser dueño de su casa. Mientras que un 23,3% se decanta por vivir como inquilino.
¿Cuánto ahorran hoy los españoles?
La vivienda se sitúa en cuarto lugar entre las principales motivaciones de los españoles para decidirse a ahorrar.
En primer lugar, se sitúa el ahorro para gastos imprevistos (incluidos los de hogar). Principal motivo para el 61% de los ahorradores. Por delante del dinero reservado para viajar (50%), para la jubilación (39%) o para comprar una casa (28,2%).
Aún así, la capacidad de ahorro en el último año ha disminuido de manera alarmante.
Según este estudio, el ahorro cae hasta un parecido al de 2016. De hecho, un 42,7% de los encuestados ahorrar por debajo de los 200 euros mensuales. Mientras que un 23% es capaz de reservar entre 200 y 500 euros. Y únicamente un 7,6% consigue ahorrar más de 500 euros.
¿Por qué no logran ahorrar más dinero?
Este desplome del número de personas que ahorran se debe a la consolidación económica del último año. Una situación que lleva a consumir más y, por tanto, a descuidar la necesidad del ahorro.
Entre los españoles que no logran ahorrar nada, la principal justificación es la falta de suficientes ingresos (48,8% del total).
También existen muchas personas que deben hacer frente a gastos imprevistos (36%).
Siendo menos los que argumentan gastar dinero en caprichos (20%), en pago de deudas (14%), en soporte económico a familia o amigos (14%) y o tener pocos conocimientos financieros (7%).
Una tasa de ahorro en mínimos históricos
Frente a esta situación, la agencia de calificación Moody’s acaba de hacer público un informe en el que alerta del desplome del ahorro entre las familias españolas.
La tasa de ahorro familiar cae un 5,7%, alcanzando su mínimo histórico con niveles inferiores a los de la pre-crisis económica. Un dato que pone de manifiesto el optimismo de los hogares, pero también la falta de previsión de cara al futuro.
Según Moody’s, se ha producido una rebaja en el endeudamiento familiar hasta el 60% del PIB. Mientras que en 2009 se situaba en torno al 83%. Pero se trata de una caída vinculada a la rebaja de las hipotecas.
Por ello, se alerta de un hecho preocupante: la profundización en ‘el suelo del ahorro’ entre los últimos meses de 2017 y los primeros de 2018. Mientras los préstamos al consumo en la eurozona crecen a un ritmo medio del 8%, en España se disparan un 15%.
Muy por encima de la deuda hipotecaria que tiene como garantía, al fin y al cabo, un bien tan seguro como es una propiedad. ¡Clave de la rentabilidad por invertir en vivienda!