Tras la caída en la compraventa de viviendas y la inestabilidad del mercado hipotecario durante el segundo trimestre, aumenta el interés de los inversores por los alquileres, los hoteles y la logística.
El impacto del coronavirus en el mercado inmobiliario no es noticioso. En efecto, hace dos meses el grupo CBRE calculaba que la inversión en ladrillo llegaría a los 8.500 millones de euros este año. Lo que representa un 30% menos que en el 2019. Sin embargo, segmentos como el alquiler residencial y la industria hotelera conservan su atractivo para recibir inversiones.
Industria hotelera
La industria hotelera fue una de las más afectados por el confinamiento y el cierre de fronteras. En consecuencia, los precios se desplomaron y algunos inversores vieron en ello una oportunidad. La gestora española Azora, por ejemplo, inició una inversión de 680 millones de euros en el sector. El énfasis está puesto en hoteles vacacionales de toda Europa y España es uno de los países con más peso.
Al respecto, la empresa sostiene que, a pesar de la incertidumbre ocasionada por el coronavirus, los inversores han sostenido su visión positiva con respecto a la industria del turismo a largo plazo.
Interés de los inversores en los alquileres
Sin embargo, según Mikel Echevarren, consejero delegado de Colliers de España, las operaciones de compraventa de hoteles turísticos tardarán un tiempo en cerrarse. Pero agrega que los mercados donde las operaciones se realizarán más fácilmente son el del alquiler residencial y de oficinas.
Frente a la imposibilidad de comprar viviendas, los usuarios demandan cada vez más pisos de alquiler. Por ello este segmento ha ido ganando terreno e incluso el valor medio de la renta por metro cuadrado en España ha aumentado en los últimos meses.
En contraste, el precio de venta de los inmuebles, en general, ha disminuido. Esto plantea una situación ideal para invertir en viviendas a precios accesibles y obtener un mayor retorno de inversión por el incremento en el valor del alquiler.
SOCIMIs
Por otro lado, los activos logísticos también han aumentado exponencialmente su crecimiento gracias al auge del comercio electrónico y esto despierta el interés de los inversores. Un claro ejemplo es el de la SOCIMI Merlin Properties.
A causa de la pandemia, esta sociedad de inversión sufrió un desplome del 42% en la Bolsa desde finales de febrero. Sus valores mínimos despertaron el interés de los inversores, que ahora compiten por comprar esta compañía, cuya cartera está valorada en más de 2.700 millones de euros.
Los números siguen siendo desalentadores, pues el impacto del coronavirus en el sector inmobiliario ha evitado 12.000 millones de euros en inversiones. Pero la llegada del otoño despierta una esperanza, ya que comenzamos a visualizar el regreso de los inversores a nuestro país.
Claro está, el progreso continuará siempre y cuando el virus no ocasione un nuevo confinamiento en España.