El concepto de “trabajo líquido” surge a partir de las teorías del pensador Zygmunt Bauman, quien disertó sobre esta época. La “Modernidad líquida”, según el filósofo, implica una sociedad globalizada, hiperconectada, fragmentada y sin certezas sobre el mediano y largo plazo. Entonces, ¿el trabajo líquido llega para quedarse? Lo analizamos en este artículo.

Las teorías del filósofo británico-polaco Zygmunt Bauman sobre los tiempos actuales dieron como respuesta el concepto de “modernidad líquida”. Según sus planteos, no estaríamos en la Posmodernidad como se creía, sino que es un aspecto tardío de la misma era. Como características principales, tenemos a la fluidez, el cambio, la flexibilidad y la adaptación, entre otros. Lo “líquido” sería una metáfora de esta época ya que no se ata en el espacio ni en el tiempo, se desplaza con facilidad, no es posible detenerlo fácilmente; todos atributos de las actuales rutinas cotidianas.

Cabe destacar que sus trabajos fueron desarrollados hasta 2017, año de su muerte. Y, por consiguiente, antes de la pandemia por Covid 19. Sin embargo, describe a la perfección los tiempos post pandémicos.

Modernidad líquida

Las palabras de Bauman tratan sobre la mutación de la Modernidad tal y cual la conocíamos. Sin embargo, suena muy actual: pareciera que las hubiera escrito post pandemia.

En sus teorías, la Modernidad líquida (o “tardía”, para otros pensadores) abarca a las desarrolladas sociedades -globales y capitalistas- como una extensión de la Modernidad propiamente dicha. Esto es así porque esas sociedades tienden a la privatización en aumento de sus servicios y a la revolución que implican las tecnologías de información. Antes, diría Bauman, el mundo era un lugar predecible y bajo control. O sea, sólido. Pero como “todo lo sólido se desvanece en el aire”, como lo definió Marshall Berman en su libro de 1982, actualmente el mundo es un lugar sin certezas, sin plazos estables, líquido y maleable.

Otro de los rasgos de esta época es la atomización de la sociedad. Esto se produce debido a la post industrialización, sumados a la globalización y avances de la comunicación ya nombrados. Estamos en un mundo cada día más conectado. Sin embargo, las relaciones interpersonales son efímeras y reemplazadas por el desapego de las redes sociales.

Por otro lado, la clase trabajadora era de vital importancia en el siglo XIX, por ejemplo. Las relaciones y movimientos que ella había protagonizado, se diluyeron en las grandes corporaciones de hoy en día.

La Sociedad líquida

Pero vayamos a las palabras exactas de Zygmunt Bauman:

“Desde los albores de la humanidad, cada generación sucesiva ha dejado sus náufragos abandonados en el vacío social: las “víctimas colaterales” del progreso. Mientras que muchos se la arreglaban para subirse al acelerado vehículo y disfrutaban a fondo del viaje, muchos otros -menos taimados, diestros, inteligentes, musculosos o aventureros- se quedaban rezagados o se les obstaculizaba sus ruedas” (Zygmunt Bauman, 2008).

Es, entonces, adaptarse a los nuevos rumbos o perecer. La aventura del progreso consiste en eso. Una sociedad globalizada, hiperconectada, fragmentada y sin certezas sobre el mediano y largo plazo, es la norma.

La mayoría de jóvenes no planifican en plazos cuándo comprarse la vivienda propia. Acuden a los alquileres. Se lo impone el presente. Prefieren ahorrar para viajar o apostar a un emprendimiento personal ya que el sueño de la casa propia es vista como algo muy lejano e imposible de concretar. Permanecer en un trabajo de por vida era una idea del pasado: hoy ir rotando de empresa en empresa es la norma. Si bien esto implica incertidumbre, lo temporal también es una forma de encarar la vida hoy en día.   

¿El trabajo líquido llega para quedarse?

Son varias las empresas en el mundo que apuestan hoy en día por esta tendencia. A partir de la pandemia y las oficinas ubicándose en los hogares, con horarios flexibles y versátiles, esta forma de labor podría ser el futuro del trabajo en sí mismo.

El denominado “trabajo líquido”, entonces, implicaría sistemas más flexibles a nivel laboral. Eso es lo que las compañías están comenzando a presentar a sus empleados.

Estas compañías ofrecen hoy, como nombramos, horarios flexibles que se adaptan al trabajador. También se ha instalado la modalidad remota para que se pueda acceder al trabajo desde cualquier parte del mundo. Esto hace crecer al sector de “freelancers” que ejecutan sus labores de manera independiente y son contratados temporalmente por las empresas. Por lo tanto, las plantas de empleados se renuevan constantemente según las necesidades del mercado. También se percibe una paulatina desaparición de estructuras jerárquicas que responden al desarrollo de dicho mercado.

Lo que queda atrás: las barreras geográficas

El sistema de trabajo líquido permite a las empresas contratar y conformar un plantel con las capacidades requeridas en el momento. De acuerdo a las necesidades de cada actividad, será contratado A o B. A su vez, las personas contratadas tienen un papel más dinámico en las empresas y pueden irse a otras en cualquier momento para desempeñarse en diferentes proyectos puntuales. Los trabajadores buscan aquellas labores que aumenten su desarrollo profesional.

Es por esto que hoy por hoy encontramos muchísimos portales de búsqueda de empleos que se manejan transnacionalmente. Páginas web como LinkedIN u otras ofrecen la posibilidad de encontrar trabajo más allá de las barreras geográficas. Es más, estas barreras se flexibilizan y hasta diluyen, asumiendo las características de la Modernidad líquida.

Un estudio realizado por la misma LinkedIN dio como resultado que entre el 69% y el 73% de los encuestados apuntaban a empleos flexibles geográficamente. También a eliminar los horarios fijos. El trabajo ya no se percibe como un tiempo y un lugar sino un momento y un espacio maleables, hiperconectados, acomodaticios.

Las empresas invertirán para adecuarse a los nuevos tiempos ya que nadie quiere ser la “víctima colateral” del progreso.

Luego de leer este artículo, nos interesaría mucho conocer cuál es tu opinión acerca de si el trabajo líquido llega para quedarse. Puedes compartirla con nosotros desde la sección “Comentarios” de nuestro Blog.

Si te encuentras en la situación de querer invertir en estos momentos, no dudes en acudir a Oi Real Estate. Un equipo de profesionales estará a tu disposición y te ayudará en todo el proceso ¡Te esperamos!

Si este artículo te ha resultado interesante, te invitamos a continuar leyendo:

agente inmobiliario Alquilar alquilar piso Alquiler alquileres Barcelona comprar Comprar piso comprar vivienda Compraventa consejos contrato de alquiler Decoración decoración de interiores diseño Diseño de interior España Euríbor Featured Hipotecas Hipotecas variables Hoteles Impuestos Inquilinos interiorismo inversiones Inversión inmobiliaria inversores invertir Madrid marketing inmobiliario mercado hipotecario mercado inmobiliario Oficinas Oi Real Estate Oi Realtor Propietarios préstamo hipotecario Sostenibilidad Tendencias Tendencias de decoración vender Vender piso vivienda Viviendas

Autor

Escribe un comentario

A %d blogueros les gusta esto: