El congreso de promotores, celebrado por APCE, puso encima de la mesa el impacto del turismo en el mercado residencial. Un impulso económico del que los establecimientos turísticos también sacan beneficio.
En un año histórico para el turismo nacional, España espera acabar 2016 con una cifra total de entre 72 y 75 millones de viajeros.
Una llegada multitudinaria con un impacto económico por encima del 15% del PIB, según Exceltur. Y que, a su vez, impulsa a otro sector estratégico: el inmobiliario.
La vivienda turística, estrechamente ligada al litoral español, protagoniza una progresiva llegada de visitantes en busca de apartamentos con vistas o villas en primera linea de mar.
Un favor que el mercado residencial devuelve incrementando el flujo de viajeros hacia los principales destinos.
Millones de turistas con destino España
2016 va camino de romper un récord turístico antes de la pensado. Las Estadísticas de Eurostat para el primer semestre del año recogen un total de 727 millones de pernoctaciones hoteleras en Europa, de las que 142 se quedaron en España.
Poco queda ya del miedo a que el turista solo haga escala en nuestro país. Prácticamente uno de cada cinco viajeros se quedó a pasar la noche en España, en contraste con la pérdida de turistas de Grecia, Italia o Francia.
La cifra es aún más impactante si tenemos en cuenta el total de alojamientos disponibles, entre hoteles, apartamentos y otros establecimientos extrahoteleros. El total de pernoctaciones en Europa alcanza el billón, de los que España se lleva 188 noches.
Segunda vivienda en el mercado residencial
La compra de vivienda vacacional dinamiza el mercado turístico, por lo que podemos considerar a ambos sectores como mutuamente dependientes.
Y es que al comprar una casa, el visitante acaba por convertirse en turista residencial en un proceso que puede durar meses. Una búsqueda que traerá consigo diversas visitas y más de una estancia temporal en el destino escogido.
A su vez, la industria turística beneficia a diversos sectores. El inmobiliario por la gestión del inmueble, el comercial porque hace falta llenar la casa, o el del transporte porque alguien debe hacerse cargo de la mudanza.
Lo cierto es que con el incremento de turistas también ha aumentado el número de compraventas y los precios de las mismas. Hoy en día, un 20% de operaciones corren a cargo de compradores foráneos. Aunque en la Costa Blanca el porcentaje puede llegar al 50%.
Beneficio global por el flujo de visitantes
Para dar respuesta a la llegada del turista residencial, los hoteles han tenido que adaptar su oferta a nuevos residentes que en ocasiones no tienen fecha de salida. La búsqueda de un inmueble que se adapte a sus circunstancias puede llevar días o meses.
Mientras que las viviendas turísticas han visto una gran oportunidad de negocio, para descontento de los hoteleros. Uno y otros aprovechan la constante llegada de viajeros.
Pero lo cierto es que con estos nuevos residentes, todos los sectores de servicios se benefician de una manera u otra.