A pesar de ser una inversión segura, el dinero a plazo ha dejado de ser atractivo para el ahorrador español. Una situación que aprovechan fondos y cuentas corrientes para ganar presencia.

A veces, tendrás que salir de tu zona de confort para obtener ganancias significativas‘. Esta frase de Robert Arnott alcanza todo su sentido en el momento actual.

Y es que, siendo segura, la inversión en depósitos bancarios hace cada vez más dificil el ahorro. Con los tipos al 0% y la rentabilidad media en torno al 1,5%, ¿es esta la mejor opción de invertir los ahorros?

Indudablemente no. Como tampoco conviene olvidar la importancia de ahorrar de cara al futuro. La necesidad de rentabilidad, pensando en mañana o en el momento de jubilarse, obliga a que el ahorrador se mueva.

Y lo cierto es que ya lo está haciendo. Concretamente, guardando cada vez menos dinero en casa y perdiendo la confianza en los tradicionales depósitos bancarios.

Cuatro años caída en los depósitos

Los hogares españoles siguen guardando un 40% de su dinero tanto en forma de depósitos como en efectivo. Tal y como recogen las “Cuentas Financieras de la Economía Española. Septiembre 2017“, elaboradas por el Banco de España.

Sin embargo, durante el pasado 2017, una buena parte del capital invertido fue a parar a participaciones y fondos de inversión. Pasando de casi 769.000 millones de euros a más de 827.000 millones en solo un año.

Este cambio de estrategia delata la pérdida de interés del ahorrador español por aquellos productos menos rentables.

Inversión en depósitos y disponibilidad de efectivo entre el ahorrador español

Entre ellos los depósitos bancarios a plazo que cayeron desde los 339.968 millones (dic 2015) a los 278.922 millones (dic 2016). O el dinero en efectivo, que pasó de los 72.004 millones (2015) a los 67.965 millones (2016).

Los datos del Banco de España son rotundos. De los 790.000 millones de euros que las familias españolas guardaban en bancos a finales de 2016, 512.000 correspondían a cuentas corrientes. Frente a los citados 278.000 en depósitos.

Tres trimestres después, el dinero de las cuentas ha subido hasta los 560.000 millones. Mientras que el de los depósitos ha caído hasta los 229.000 millones.

El ahorrador español quiere ganar, no guardar

Sin duda, los últimos años han ayudado a los españoles a optimizar el ahorro y a reducir deuda.

Con la riqueza de las familias creciendo a un ritmo del 4,3%, hogares e instituciones sin ánimo de lucro cuentan ya con 1,332 billones de euros (sept 2017).

Esta cantidad, equivalente al 115,8% del Producto Interior Bruto (PIB), supera en 0,7 puntos a la riqueza financiera disponible un año antes.

Evolución de los activos financieros en el ahorrador español

Demostrando, que el ahorrador español permanece por encima de los niveles precrisis. Dejando atrás el volumen de capital de principios de 2007, ligeramente inferior al billón de euros.

Y aunque la riqueza financiera neta, respecto al trimestre anterior, ha caído en un 1,34% la conclusión debe ir más allá.

Poniendo de manifiesto que los hogares han sacado provecho a estos últimos años para sanerar su economía y aumentar riqueza.

Una cartera con mucha diverdad de activos

Entre los activos financieros de los hogares, el dinero en efectivo y los depósitos bancarios retrocede (40% del total).

Frente al incremento de las participaciones, en fondos de inversión (14%) y en el capital (25%). O a la presencia, seguros y fondos de pensiones (17%) y el resto de activos (4%).

Presencia de activos financieros en los hogares españoles

En total, la riqueza financiera en septiembre de 2017 alcanzó los 2.109 millones de euros. Un 2,8% más que un año antes.

Debido, especialmente, a la compra de activos financieros por 25.000 millones de euros y a una revalorización de 31.000 millones en los ya existentes.

Alternativas de inversión para el ahorrador español

Frente a la mayoría de productos bancarios, o guardar dinero en efecto, la inversión inmobiliaria ofrece rentabilidades medias del 5,5% al 8,4%.

Situándose como una de las alternativas más atractivas para el ahorrador español. Desde el alquiler de una vivienda (7,3%) al de un local comercial (8,4%) o una oficina (7,8%).

Pocos productos financieros pueden igualar a la compra de activos inmobiliarios.

Autor

Escribe un comentario

A %d blogueros les gusta esto: