El impacto que provoca la llegada de una multinacional a una ciudad va mucho más allá de lo aparente. Ciudades y países de todo el mundo ven como el mercado inmobiliario permanece atento al ‘efecto Amazon’.
Además de un reto para las demás empresas y las infraestructuras locales, las grandes compañías llevan consigo una gran plantilla de trabajadores. Cuyas necesidades deben estar cubiertas. Y ello incluye el mercado de la vivienda.
Con ‘solo’ veinticuatro años de historia, Amazon está a punto de ser la primera empresa multibillonaria del planeta. Un gigante de la tecnología, con presencia tanto física como digital, cuya impacto transforma cada lugar donde va.
El llamado ‘efecto Amazon’ va mucho más de la venta y la distribución de productos. Llegando a condicionar la vida de millones de personas y la economía de países enteros. Y, como es lógico, el mercado inmobiliario no es inmune a su influencia.
La reciente llegada de Amazon a Vancouver (Canadá) supone ya una auténtica revolución para el mercado inmobiliario local. Una transformación protagonizada por las cerca de 5.000 personas que se incorporarán a la multinacional a lo largo de los próximos cuatro años.
Esta noticia ha disparado tanto los precios de venta como las rentas del alquiler. Marcando un antes y un después como ya sucedió en Seattle (Estados Unidos). La primera sede de Amazon hasta la fecha.
El ‘efecto Amazon’, de la logística hasta la vivienda
Cada vez que Amazon anuncia la llegada de miles de trabajadores a una nueva ciudad, el mercado inmobiliario local empieza notar las consecuencias.
El último ejemplo lo ha protagonizado la ciudad canadiense de Vancouver. Donde la multinacional quiere construir una nueva nave que albergará la segunda base de operaciones multinacional.
Un gran edificio que acogerá a 5.000 nuevos empleados durante los cuatro próximos años. “Es una inversión con un enorme impacto para una ciudad como Vancouver”, apuntaron representantes del portal Zillow Group.
El ejemplo más reciente se produjo hace algunos años, en Seattle. La ciudad estadounidense pasó de tener 5.000 empleados de Amazon en 2010 a los 40.000 trabajadores actuales.
Una circunstancia que incrementó un 50% los alquileres. Mientras que el precio de venta se disparó un 91% en la última década. ¿Sucederá algo parecido en Vancouver?
Creación de empleo y atracción de empresas
De hecho, Seattle es una de las ciudades donde más ha crecido la economía en los últimos años.
El conocido como ‘efecto Amazon’ no solo afecta a la multinacional. También atrae a más empresas que quieren instalarse junto al gigante tecnológico.
“Las empresas quieren abrir sus oficinas junto a las de Amazon por el efecto que esta tiene en la atracción de talento y la generación de negocio” comentan los expertos.
Un gigante del comercio electrónico no solo crea empleo, sino que puede llegar a actuar como iman para otras empresas. Allí donde se instala crecen tanto los alquileres de las oficinas como el precio de la vivienda.
De hecho, el ayuntamiento de Seattle ya toma las primeras medidas. Entre ellas destaca la imposición de un tributo del 20% para los compradores extranjeros de viviendas y una tasa a las viviendas vacías.
Con ello se pretende frenar el encarecimiento de la vivienda. Aunque su éxito es más que dudoso ya que en el último año los precios han aumentado un 16%.
¡Consecuencia del imparable ‘efecto Amazon’!