Decimos que los espacios de coworking son una “sensación” en tendencia a la alza. Un coworking para cada necesidad. Uno de estos espacios colaborativos de trabajo, ubicado en la frontera de Moldavia próxima a Ucrania, acoge y es el elegido por los exiliados ucranianos para mantener sus actividades obligadamente abandonadas como consecuencia del conflicto en Europa del este y la invasión rusa. En este artículo de Oi Real Estate, te invitamos a conocer Artcor, el coworking para refugiados ucranianos en Moldavia. Anímate a leer para conocer mucho más.
En este artículo encontrarás:
Más que puro marketing
El coworking (o espacios colaborativos de trabajo) es ante todo una espectacular estrategia de ventas; una metodología de trabajo que ha logrado que se hable de sí y se escriban ya sendos episodios en las páginas del marketing inmobiliario. Si bien todavía no puede ser considerado un boom, es en sí mismo una opción que no detiene su andar; un gigante que marcha a paso lento pero incansable.
Si el home office está considerado como un avance vital en el plano de las modalidades de trabajo; entonces podríamos afirmar que el coworking hace ver un tanto ridículas, deslucidas o vetustas a las plantas laborales de las denominadas convencionales. Subrayando el concepto “share” (compartir), sus nociones innovadoras en diseño, son una pista de carreteo abierta para los trabajadores independientes o las firmas que encuentren agotados los recursos de la oficina estándar.
Al fin y al cabo ¿quién querría volver a ocupar su asiento de oficina de 9 AM a 5 PM cuando puede elegir a su gusto sus horarios de mayor productividad? ¿Lo habías pensado de esa forma?
El edificio escondido
Entre las muchas variantes de coworking, invasión rusa a Ucrania mediante, un edificio extraño y de singulares características, ha logrado entrar en los radares de los medios especializados en el sector inmobiliario. Estamos hablando del Artcor, un particular bloque ondulado y amarronado; un espacio coworking situado a pocos metros de la sede de Naciones Unidas en Moldavia y próximo a la frontera con Ucrania; más específicamente sobre una calle angosta y sin un acceso corriente.
Deberás hacerte de un dispositivo dron para hacer contacto visual con esta edificación. Si lo piensas desde su descripción, parece el espacio físico perfecto para un coworking. No se ve desde la acera propia ni la de enfrente y solo se accede a sus llamativas instalaciones mediante una ruta oculta. Artcor resulta un oasis para los artistas moldavos que aprovechan (además de encontrar en su interior lo necesario para el trabajo creativo) sus curiosas y desproporcionadas escalinatas para tomarse cientos de selfies grupales o individuales.
Es que Chisináu, ciudad capital de Moldavia, es también el corazón de la comunidad artística y cultural de ese país. Sus movimientos relacionados al arte, el cine, el teatro y la música se han visto reforzados y el edificio muy solicitado; especialmente con la irrupción de rusia en territorio ucraniano, por periodistas, escritores de artículos, blogueros independientes y copywriters. También por refugiados ucranianos que buscan y pueden continuar desarrollando desde allí sus eventuales actividades laborales vinculadas al freelance creativo.
25 freelancers refugiados – 25 historias
Artcor cuenta al día de hoy con 25 refugiados ucranianos ocupando sus instalaciones, todos freelancers que debieron recomenzar sus vidas con horizontes inciertos. La directora de Artcor, Viorica Cerbusca, recibió ni bien comenzado el conflicto a los primeros visitantes del país vecino; llegados con la sensación mezclada entre la amargura de tener que abandonarlo todo e inmediatamente después sentirse agradecidos por conservar sus puestos de trabajo remoto. Es en definitiva la única herramienta con la que cuentan para reiniciar una vida de momento inestable.
Los refugiados encontraron de inmediato una estancia gratuita en Artcor; en lo que podría considerarse como una legítima oda al coworking y su concepto del “compartir” mencionado párrafos arriba. Según declaró Cerbusca al prestigioso sitio Hipertextual:
Si tienes que hacer la maleta rápidamente para huir, no puedes traerte un edificio contigo. Han llegado arquitectos, especialistas en IT, diseñadores… Todos los que vienen tienen una relación con empresas tecnológicas.
Viorica Cerbusca – Directora Artcor
El momento de ser solidarios
Los conflictos bélicos ponen de manifiesto lo peor y lo mejor de cada individuo ¿Existe un momento más indicado que este para sacar afuera el ser solidario en cada uno, sobre todo si te encuentras próximo a la línea de fuego? ¿Qué puedes tú hacer y qué estás dispuesto a dar al respecto? Para Artcor, esta es una instancia clave y lo ha demostrado con creces.
Muchos de los refugiados ucranianos han permanecido durante algunos días en sus plantas, dada la movilidad forzosa que los impulsó a seguir camino hacia otros lares; mientras que otros tantos continúan desempeñando sus funciones como corresponsales o teletrabajadores con la esperanza de que el conflicto termine cuanto antes para poder regresar a sus casas en Ucrania.
El bot de Telegram
En este sentido, Cerbusca se ha manifestado por demás satisfecha con la función de Artcor como espacio coworking, pero apuesta por ir un paso más allá. Ha impulsado la creación de un bot de Telegram con la sola intención de vincular a los refugiados regionales. En su consideración, el bot…
Puede ayudar a crear una comunidad o a ofrecer servicios. Por ejemplo, pueden decir que son pintores, profesores o cualquier otra profesión y ofrecer su experiencia laboral desde allí. El bot, todavía en beta, podría ser una herramienta para que los refugiados puedan generar más recursos no solo fuera de Ucrania, también en otras zonas del país en las que se han mudado ucranianos que huyen de la guerra.
Viorica Cerbusca – Directora Artcor
Artcor como referente
Este interesante concepto coworking (hoy día con los ojos del mundo puestos en su particular edificio) se exhibe entonces con la intención de convertirse en un referente, propio del momento de urgencia regional.
Sin ser el único, Artcor representa todo un estandarte del ser solidario impregnado en las cercanías de la frontera ucraniana. Si conoces otros proyectos emprendedores (de poca, mediana o gran envergadura) al servicio del complejo momento transitado por los auto exiliados, no dudes en compartirlo en nuestra bandeja de comentarios.
Fuente: Hipertextual
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