La oferta de alojamiento turístico choca con el Gobierno Balear tras aprobarse una reforma de la ley turística que incluye límites al número de plazas e importantes sanciones.
El pasado martes 8 de agosto, el Gobierno de Baleares hizo público los nuevos límites en el número de plazas turísticas disponibles para todo el archipiélago.
Coincidiendo con la entrada en vigor del Decreto Ley que modifica la regulación del alquiler turístico, se establece un tope máximo de 623.624 plazas. Un techo que puede sobrepasarse, ya que existen numerosas peticiones tramitadas antes de la entrada en vigor de la moratoria.
El objetivo es ir ‘recortando‘ en número de plazas que fueron concedidas de manera excepcional. Unas 120.000 solo en la isla de Mallorca.
Además de sancionar a todas aquellas plataformas que no se adapten a la ley con multas de 40.000 a 400.000 euros.
¿Ayudarán estas medidas a solucionar el problema balear de vivienda?
Regulación del alojamiento turístico balear
La reforma de la ley turística de Baleares viene a regular el alojamiento turístico, poniendo límites a la actividad y haciendo desaparecer los establecimientos ilegales. Del nuevo límite de más de 623.000 plazas, un total de 435.707 corresponderán a Mallorca.
Se calcula que 92.931 corresponde a viviendas turísticas. Mientras que las plazas reguladas de alojamiento turístico se elevan a 294.163 (5.964 en tramitación). Y aún había que añadir otras 42.649 plazas disponibles en la isla.
Por su parte, Ibiza contará con 109.800 plazas. De ellas, 80.143 se destinan al alojamiento turístico frente a otras 20.627 viviendas de uso turístico y 9.000 plazas extras.
Finalmente, Menorca dispondrá de 60.117 plazas. Una tercera parte (20.657 plazas) corresponden a viviendas de alquiler turístico. Mientras que la reserva para Formentera quedará en un total de 18.000 plazas.
Los nuevos límites legales del turismo
El Decreto Ley 3/2017, que modifica la Ley del Turismo en las Islas Baleares, permite cierto optimismo al Gobierno balear. Entre sus cálculos está la ‘perdida’ de unas 120.000 plazas turísticas simplemente en la isla de Mallorca.
Se trata de plazas con permiso excepcional desde 1999 a las que se no se permitirá continuar con su actividad. y para las que no se contempla sustitución en el futuro mapa turístico.
Uno de los detalles ya conocidos será el envío de requerimientos a las plataformas que no se adapten a la nueva normativa. Dándoles un plazo de quince días para ponerse al día.
Desde la Dirección General de Turismo, señalan que ya se ha empezado a notar un cierto decrecimiento de la oferta turística no regulada. Aún así insisten en avisar que aquellas empresas y plataformas al margen de la ley podrán llegar a ser sancionadas con multas que oscilan entre los 40.000 y los 400.000 euros.
De hecho, para llevar a cabo un control más exhaustivo la nueva norma del Gobierno Balear contempla la incorporación de cinco nuevos inspectores y de tres nuevos tramitadores.