La actividad del mercado residencial y sus características más demandadas han provocado que oferta y demanda se distancien al establecer el precio de la vivienda.
Los mercados en plena actividad no son una excepción cuando se trata de fijar un valor para cada producto. Es el caso del sector inmobiliario.
El portal pisos.com elabora anualmente un estudio comparativo entre la demanda y la oferta residencial, en los mercado de venta y alquiler.
Esta distancia se ha hecho más grande en el último año. No solo por la revalorización en las zonas más cotizadas, sino también la evolución en el tipo de vivienda más demandada.
La brecha que separa a vendedor y comprador llega hoy hasta el 27%, mientras que la separación entre dueño e inquilino puede llegar al 19%.
Sea como sea, unos y otros están condenados a entenderse. Pero también a hacer encajar lo que el mercado ofrece con lo que el cliente necesita.
El precio de la vivienda en venta
La diferencia entre el valor de los inmuebles que se ofertaron y demandaron en 2016 estuvo en 26.180 euros. Una brecha del 27% que supuso un aumento del 2% respecto al año anterior.
Esta diferencia alcanzó máximo nivel hace ocho años, cuando a comprador y vendedor les separaba un 55% del precio. Desde entonces, la diferencia se ha ido moderando hasta alcanzar el 20% en el año 2013. Subir al 25% en 2014 y volver a caer al 23% en 2015.
El presupuesto medio de salida es de 97.500 euros frente a un precio medio de venta de 123.680 euros (1.546€/m2).
Oferta y demanda se acercaron especialmente en el País Vasco (-4%), Castilla La Mancha (+9%) y Aragón (+10%). Mientras que las grandes diferencias se concentraron en La Rioja (+38%), Comunidad Valenciana (+34%) y Canarias (+33%).
En ese sentido, cabe remarcar que las únicas comunidades autónomas donde la demanda superó a a oferta fueron el País Vasco y Navarra.
El tipo de propiedad más demandada
Este estudio nos permite ver como, poco a poco, compradores y vendedores abandonan posturas de total desconexión. No solo por precio sino también por características propias de la vivienda.
El piso medio más solicitado para compra cae de los 90 m2 ofertados a los 80 m2 de la demanda general, cayendo así un 10,47% su precio entre 2015 y 2016.
Mientras que la superficie más demandada en los pisos en alquiler ha caído de los 90 m2 de 2010 a los 70 m2 de 2016.
Financiación para la compra e incremento en las rentas de las principales capitales hacen que el grueso de la demanda de vivienda encoja. Concentrándose paulatinamente en pisos más pequeños y de precio más ajustado.
El precio de la vivienda en alquiler
La distancia entre la renta anunciada por los propietarios y el presupuesto de los inquilinos también ha aumentado. De hecho, la subida del alquiler mensual ha sido importante en 2016.
Esta diferencia que fue de un 27% en el año 2010 ha ido bajando hasta un 10% el pasado 2015. Con un incremento final de la brecha en 2016 del 19%.
La diferencia fundamental entre 2015 y 2016 no ha sido tanto de superficie como precio de la vivienda para ese tamaño medio.
Los 70 metros cuadrados se han repetido en los últimos seis años. Pero mientras que en 2015 y 2016, el inquilino ha ofertado 350 euros mensuales, hoy es el propietario quien pide 416 euros por el mismo piso.
Del mapa nacional cabe destacar el hecho de que solo en Baleares la demanda supera a la oferta. Pero también que vivienda ofertada y demandada se igualan en Aragón, La Rioja y Cantabria.